PRIMERA GALERÍA DE ARTE CABALLERISTA

El Colegio Juan B. se llenó de creatividad, color y expresión en la que fue su primera Galería de Arte en Vivo. Un evento que no solo mostró el talento de los estudiantes, sino que también ofreció un espacio único para la interacción entre artistas y espectadores. A diferencia de las tradicionales exposiciones estáticas, esta galería permitió a los participantes ver en tiempo real cómo los artistas daban vida a sus obras.

La idea central de esta primera edición fue acercar el arte a la comunidad escolar de una forma dinámica y participativa. Mientras las obras iban tomando forma frente a los ojos del público, los estudiantes, profesores, padres de familia y algunos policías que asistieron, pudieron ver el proceso creativo de los artistas en acción. Este enfoque rompió con la barrera de la distancia entre la creación artística y el espectador, permitiendo una conexión más profunda con la obra.

Los participantes, estudiantes de diversas edades y niveles de habilidad, se distribuyeron en diferentes estaciones dentro de la galería. Con lienzos, lápices, pinceles, carboncillos y otros materiales a su disposición, se sumergieron en el desafío de plasmar sus ideas sobre el papel mientras el público los observaba con curiosidad y admiración.

Algunas obras eran retratos, otras abstractas, y algunas representaban escenas de la vida cotidiana o paisajes imaginarios. Cada artista tenía su propia técnica y estilo, pero todos compartían una pasión por el arte que era evidente en la concentración y dedicación con la que trabajaban.

Una de las características más interesantes de este evento fue la interacción constante entre los artistas y los asistentes. Los visitantes pudieron preguntar a los participantes sobre sus procesos creativos, las fuentes de inspiración detrás de sus obras y los desafíos que enfrentaban al dibujar en vivo. También hubo momentos en los que el público se animó a participar directamente, tomando un lápiz y sumándose a la creación colectiva.

Para algunos estudiantes, la experiencia fue una oportunidad para compartir su amor por el arte con sus compañeros y profesores, mientras que otros pudieron descubrir su pasión por el dibujo en medio del evento. La posibilidad de ver cómo los artistas daban forma a sus ideas en tiempo real hizo que el arte fuera más accesible y comprensible.

La galería no solo celebró el arte visual, sino también el valor de la creatividad como una forma de expresión individual y colectiva.

La Galería de Arte en Vivo ha dejado claro que, a través de este tipo de iniciativas, se pueden construir puentes entre las distintas formas de arte, la comunidad escolar y la apreciación del talento juvenil.

El arte no solo se mira, se vive. Cada trazo, cada color, cada emoción, son parte de nosotros.